Mario Marín Torres, meses antes de dejar la gubernatura del Estado, sostuvo una reunión urgente con todos sus colaboradores de primer, segundo y tercer nivel y fue muy claro: Pórtense bien, dejen la casa limpia, ustedes serán los únicos responsables de los problemas que pudieran venir y tendrán que rascarse con sus propias uñas.
El tatiasca del sexenio pasado no se equivocó y ahora la pandilla está al borde de la locura, porque sienten que el mundo se les viene encima debido al procedimiento que e instauró en su contra.
Sabemos que todos los de la burbuja marinista robaron, pero pocos dejaron huella. Javier García Ramírez y Alfredo Arango García, no pudieron ocultar los rastros de sus fechorías, por el contrario, en pleno ejercicio de sus funciones y después de concluidas, se dejaban exhibir a bordo de ostentosos vehículos, asistían a espectáculos haciendo gala de impunidad y poder económico, hasta que se les apareció el diablo.
Ahora las sabias palabras de Mario Marín Torres, los están alcanzando. No hicieron caso, se dedicaron a la disipación de recursos ajenos, a los excesos de poder y ahora enfrentan, junto con sus familiares, la aplicación de la Ley y el escarnio de la sociedad, que desde hace algún tiempo ya los había sentenciado: Culpables. Lo ideal es que también se procediera contra el ex mandatario del sexenio anterior, pero lamentablemente, por declaraciones del propio mandatario estatal, Rafael Moreno Valle, no está sujeto a investigación, lo que quiere decir que por el momento es intocable y goza de impunidad.
Mientras tanto sigue el tormento chino y suplicio para más de una decena de ex funcionarios marinistas, entre ellos Gerardo Pérez Salazar, ex Secretario de Finanzas; David Villa Issa, ex Subsecretario de Egresos; Valentín Meneses Rojas, ex Secretario de Gobernación; Eduardo Macip Zúñiga, ex director del SOAPAP; Jorge Mendoza Velarde, ex Subsecretario de Administración, Rodolfo Chávez Carretero, ex director del Capfcce; Eduardo Papaqui, ex director de Atención Ciudadana y algunos otros, probables responsables de malversación de fondos públicos. Varios de ellos, mientras son peras o perones, determinaron poner tierra de por medio para evitar la prisión.
AGÜERA HARA UN ALTO EN EL CAMINO: DEJARÁ LO BUENO Y ELIMINARÁ LO MALO
La repentina y sorpresiva caída política de Enrique Aguera Ibáñez, generó mucho ruido al interior de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, donde los amigos y enemigos del rector ya daban como un hecho la salida de su patrón, con destino al Senado de la República, apoyado por el PRI – PANAL – Verde Ecologista.
Testigos de cómo se desencadenaron los acontecimientos, comentan que la salida de Agüera Ibáñez de la rectoría de la BUAP, era un hecho. No renunciaría, sino iba a solicitar licencia temporal al cargo, -¿lo contemplará la Ley Orgánica de la Universidad Autónomas de Puebla…?- y su relevo sería Alfonso Esparza Ortiz, tesorero de la Benemérita.
Todo estaba listo para que Agüera Ibáñez tomara maletas y se fuera a su aventura política, previa ceremonia de relevo de rector, pero algo inesperado y de última hora, hicieron abortar todos los planes, y el oriundo de Poza Rica, determinó mandar a volar todo y permanecer al frente de la BUAP. Los motivos: el rompimiento de la alianza PRI – Panal y la brutal división entre los dinosaurios priistas a quienes les importan tres pepinos la unidad de su partido y solo, por ambición personal, buscan los cargos de elección popular.
Dicen que del plato a la boca, se cae la sopa y eso precisamente aconteció con Agüera Ibáñez, quien el jueves 12 de enero, cuando se dirigía a un evento político, disfrazado de académico en El Seco, organizado por alcaldes y poderes fácticos de la región, en el camino fue informado de los últimos acontecimientos políticos y que las cosas como se habían planeado inicialmente, habían cambiado.
Molesto, Agüera determinó no llegar al evento multitudinario, -dicen que había más de 10 mil personas-, y ordenó al chofer regresar a la ciudad de Puebla. Convocó a una reunión extraordinaria con sus principales colaboradores,
PODRÁ SER CANDIDATO, PERO NO DIPUTADO.-Como no pudo colarse en las listas del PRI, debido a la mala fama que arrastra, Darío Carmona García, ex Secretario de Educación, acudió con su socio y cómplice, Fernando González Martínez, yerno de Elba Esther Gordillo, líder sempiterna del SNTE, para colarse como candidato del Panal a diputado federal por el distrito II de Zacatlán. Para lograr sus propósitos, Carmona García, quien públicamente dijo que jamás sería candidato, contó con un empujoncito de Luis Maldonado Venegas, consentido de La Doña, que además lo exoneró de sus cuentas.
¡¡Qué asquerosidad, es todo esto….!! Diría el innombrable….
ALGO HUELE MAL. Resulta extraño que Luis Maldonado Venegas, Secretario de Educación, haya metido las manos al fuego por Darío Carmona García, ex titular de la SEP. Al menos en radio pasillo, -deber de la contralora Patricia Islas investigar-, se habla sobre algunas propiedades que logró como ex funcionario marinista y no precisamente con el producto de su salario. Personas cercanas a Carmona García, hablan de un rancho en Oriental y otro en Tlaltenango, además del centro comercial “Cristo Rey” allá por el rumbo de Pueblo Nuevo, supuestamente a nombre de su suegro Fernando Lima, jubilado del ISSSTE y dueño del Instituto educativo INOVA, que cuenta con pre escolar hasta bachillerato. En fin habrá que checar estos datos para tener la certeza. De ser ciertas, que se le castigue, sino, que públicamente se declare inocente….
1 comentario:
Lo que considero de tristeza es que un hombre salido "del pueblo" y me refiero a Mario Marin, Se atreva a robarle de la manera que lo hizo a la gente como todos nosotros; eso les pasa por creer en ese tipo de ratas. Por lo menos nuestro dirigente en jefe ha demostrado que no vive de lo que le roba al pueblo si no que se preparó para apoyarlo.
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